Granja Tendencias culinarias a base de huevo

Hoy en día se ha recuperado el valor por los alimentos auténticos, los que más se asemejan a una producción casi artesanal de otra época, este es el caso de los huevos camperos, que sin un estudio que respalde que son mejores, hay una tendencia bastante consolidada en su consumo, por eso en Granjas Redondo ofrecemos este y otros tipos de huevos que ofrecen una excelente calidad y un sabor como el de antes.

A esto hay que sumarle que están considerados como una maravilla proteica, uno de los pilares de la cocina mediterránea tan saludable porque es equilibrada y variada, con recetas que aportan todo lo que una persona necesita para enfrentarse a su día a día.

Además de formar parte de muchas recetas, saladas y dulces, el huevo campero es un ingrediente que no puede faltar en ninguna cocina, tanto si hablamos de las más tradicionales como de las más innovadoras.

Una de las últimas tendencias en el cocinado del huevo en las que se respeta el producto y sus propiedades sin añadirle procesos y cocinados que incorporen más calorías o que lo saquen de la lista de los alimentos saludables es el Cloud Egg o Nube huevo, que está causando furor entre los apasionados por la cocina y por fotografiarla para mostrarla en las redes sociales.

Los Cloud Eggs se han posicionado fuerte como alternativa para un buen desayuno lleno de proteínas y con muy pocas calorías, aunque son adecuados para cualquier comida del día, la cave como siempre está en el tipo de elaboración y en que puede ser combinado con un sinfín de alimentos, como pan, vegetales, queso, jamón dulce o salado y muchos otros más, tu imaginación es el límite.

Pero, ¿cómo se preparar los Cloud Eggs? Pues bien, su elaboración es muy sencilla. Se trata de separar la yema de la clara, reservando la primera, batimos la clara hasta conseguir la textura esponjosa del punto de nieve, una vez lograda se coloca en montoncitos en la bandeja del horno, dejando un hueco en el centro para después colocar la yema. Dejamos que se cocine unos minutos en el horno hasta que se quede doradita por encima. Después colocamos en el hueco que hemos dejado para ello la yema y lo volvemos a meter al horno un par de minutos, aunque dependerá de lo cocinada que te guste y listo para presentar solo o en compañía de tus ingredientes preferidos.