Blog ¿Cuántas formas de preparar el huevo conoces?

Entre los alimentos más sanos, ricos y versátiles que se pueden incluir en una dieta están los huevos ecológicos. Este producto en muchas ocasiones es el ingrediente protagonista del plato, pero también se utiliza como acompañamiento a muchas elaboraciones. Existen muchas formas de prepararlos, pero ¿cuántas podrías nombrar? En esta ocasión nos gustaría aprovechar este post para hablarte de las distintas maneras de preparar un huevo. Estamos convencidos de que algunas te resultarán nuevas.

Huevos con cáscara

A la hora de cocinar huevos con cascara hay que tener en cuenta el tiempo de cocción, además de utilizar un huevo que no tenga fisuras o suciedad en su cáscara. Los huevos duros y los huevos pasados por agua son las formas más tradicionales de preparar huevos ecológicos con cáscara. Los puedes cocinar de una forma u otra según prefieras la yema: líquida (3 minutos) o cuajada (11 minutos). Sin embargo, para quienes prefieran un punto medio están los huevos mollets o mullidos, cuyo tiempo de cocción es de 5 minutos. Estos huevos pueden conservarse en el frigorífico hasta dos días sin pelar y se pueden servir en ensaladas o con guarniciones.

 

Huevos sin cascara y no batidos

Aquí encontramos más variedad de preparaciones. Por ejemplo, los huevos escalfados se cocinan en un recipiente con agua y vinagre (sin sal). Cuando hierva es momento de introducir el huevo y con una espumadera hay que envolverlo. La clara debe cuajarse y la yema tiene que quedar líquida. Los huevos cocotte también están deliciosos para guarniciones y se elaboran en un recipiente fabricado con un material resistente al calor. Antes debe untarse con mantequilla, introducir el huevo y ponerlo a hervir en una cazuela al baño María. Por supuesto no nos olvidamos de los huevos fritos. Esta es una de las maneras que más disfruta todo el mundo a la hora de comer huevos ecológicos. Y son de Avícola Redondo, mejor.

 

Huevos sin cáscara y batidos

Una de las mejores formas de preparar los huevos son revueltos. Las posibilidades son infinitas, ya que al revuelto le puedes añadir otros alimentos (gambas, chorizo, ajetes, espárragos, setas, etc.). Por último tenemos que nombrar a uno de los platos que no sería posible sin los huevos: la tortilla. ¿Y a ti cómo te gusta? ¿Francesa (enrollada) o a la española? Desde Avícola Redondo sabemos que muy pocas personas pueden resistirse a este último manjar, ya que es un plato tradicional de nuestra gastronomía.