Blog Mitos y realidades sobre el huevo

Existe una gran cantidad de mitos y creencias en torno a los huevos de gallina, y no todos son verdaderos. De hecho, muchas cosas de las que la gente piensa sobre comer huevos y cómo afectan a la salud, son completamente falsas. Por eso, hoy queremos desmontar algunos mitos y resolver todas las dudas posibles sobre este alimento tan importante para nuestra dieta.

 

¿Cuál es la verdadera relación entre los huevos y el colesterol?

Una de las creencias más arraigadas sobre los huevos es que suben el colesterol. Es cierto que el huevo contiene colesterol. Sin embargo, no ayuda a aumentar los niveles del colesterol “malo”. En este sentido, se consideran otros factores como más determinantes para incrementar los niveles de colesterol en sangre, como puede ser la predisposición genética de la persona, sus malos hábitos, el peso corporal o el sedentarismo, por ejemplo. Por eso, debemos olvidarnos de la restricción de no comer más de un huevo al día, sobre todo en el caso de personas sanas.

 

¿Es mejor comer la clara sin la yema?

El huevo se caracteriza por tener un elevado contenido de proteínas y grasas saludables, así como otros nutrientes que están incluidos tanto en la yema, como en la clara. Es verdad que la clara tiene más proteínas que la yema, pero, al separarlas, además de ingerir menos proteínas, también se pierden otros elementos nutricionales importantes que se encuentran en la yema, como las vitaminas A, D, E, B1, B2, hierro, potasio y fósforo. El huevo también es rico en antioxidantes, y destaca por su alto contenido en colina. Si no comemos el huevo entero, no estamos aprovechando todos sus nutrientes.

 

¿Perjudica el huevo a la pérdida de peso?

Otro de los mitos más populares sobre los huevos, es que engordan. Lo que hay que pensar, es que el huevo no es un alimento que deba evitarse con el objetivo de perder peso. Lo que quizás sea necesario cambiar, es la técnica de cocinado, las salsas o los acompañamientos. El huevo, como bien sabemos en Granjas Redondo, además de ser bajo en calorías y rico en nutrientes, es un alimento saciante y que incluso puede ayudar a la hora de realizar una dieta saludable para perder peso.