No cabe duda de que la tortilla es una de las expresiones culinarias del huevo más conocidas y veneradas por todo el planeta. La extrema sencillez de su preparación en la forma más básica y el efecto que sin embargo tiene como lienzo para experimentar con todo tipo de complementos y recetas dan mucho juego, y todo ello sin olvidarnos del buen aporte nutricional que supone. Si además tenemos la ocasión de prepararla con unos buenos huevos ecológicos, podremos disfrutar de un sabor incomparable.
El caso es que estas características la han hecho propensa a protagonizar una y mil variaciones, que en ocasiones se han convertido en parte importante de la gastronomía de los países respectivos. Desde Granjas Redondo te invitamos a un pequeño tour culinario virtual por el mundo para conocer lo que se hace más allá de España y Francia.
Frittata
Bajo esta palabra de glamurosa sonoridad italiana se esconde una tortilla con ciertas particularidades: se sirve abierta, con una apariencia similar a la del quiche, pero los ingredientes a añadir se mezclan directamente con el huevo batido antes de elaborar la tortilla, como hacemos en España. Como dato curioso, lo que hoy conocemos como ‘frittata’ no se consolidó hasta hace relativamente pocos años. Así es que en su momento, en inglés, era un término que se usaba de forma intercambiable con ‘omelette’.
Omeleta griega
Siguiendo al mismo tiempo el camino de esa etimología y de la costa mediterránea, no podemos olvidar que Grecia tiene su propia idea de lo que hacer con huevos batidos y una sartén. Lo que tiene de particular es que se suele invertir la concentración de huevo y de otros ingredientes, de modo que el huevo acaba jugando un papel casi como de argamasa entre distintos sabrosos alimentos.
Okonomiyaki
Viajamos a un destino más exótico: Japón, uno de los países que más partido saca al huevo en la cocina, para conocer un plato que igualmente no está falto de exotismo. Su base se elabora mezclando huevos y harina, obteniendo así algo a medio camino entre una tortilla y una tortita pero con un gusto salado y marcado por los distintos condimentos que se emplean en la receta: boniato, repollo y el clásico ‘dashi’ japonés. Sobre esta base con tanta personalidad se extiende todo tipo de ingredientes, casi como en una pizza, e incluso existen restaurantes especializados en los que el cliente se puede preparar sus propios ‘toppings’ a su gusto.
Huevos fu yong
También de origen asiático, nos encontramos con un plato que sin embargo nos puede recordar mucho más a las tortillas a las que estamos acostumbrados por aquí. La explicación quizás se halle en que se trata de una especialidad propia de la diáspora china en Estados Unidos, Reino Unido o Indonesia. Sus elementos diferenciales son el uso de una mezcla de verduras muy variadas para el relleno y el acompañamiento de salsa, que puede ser de tomate o tipo ‘gravy’.